I Live with Models: Candidata a la peor comedia anglosajona de esta década

Serie de TV

“I Live with Models”

(Vivo con modelos)

Reino Unido

2015

Sinopsis (Página Oficial):

Cuando Tommy, un camarero informal y desaliñado, es descubierto como modelo de manos, se lanza al vacío yéndose a vivir con tres modelos a un lujoso apartamento en Miami Beach. Tommy es un tipo simpático y regordete, a quien sus manos perfectas le catapultarán al estrellato y le lanzarán al glamuroso y despiadado mundo de la industria de la moda. Tommy es un individuo que se atreve con todos los retos a los que se enfrenta en su nueva vida. Lo que no sabe es lo que le espera: la convivencia con tres especímenes de compañeros de piso que además son modelos. Una modelo de catálogo que va de ‘pija’ y reniega de su pasado de chica de pueblo, un donjuán musculado con cerebro de mosquito y una diva de pasarela un tanto neurótica y de dudosa ética.

Crítica Bastarda:

Si me preguntan sobre la peor comedia anglosajona de la presente década tendría en cuenta sin lugar a dudas “I Live with Models”. La sitcom creada por Jon Foster y James Lamont es posiblemente una de las mayores defecaciones televisivas que se han visto en mucho tiempo. Sin discusión. Y es que el show que ha supuesto la primera producción de Comedy Central internacional ha construido un catálogo de sketchs rancios y chistes que no habrían ni pasado el corte en la comedia más descafeinada y menos inspirada de CBS. Nos vamos a Miami para descubrir cómo un camarero con sobrepeso, interpretado por David Hoffman, consigue cumplir su sueño al ser descubierto como modelo de manos y tener que compartir piso con un peculiar trío de afamados personajes. Nos presentan a un estereotipado modelo musculado ligón —cuyo tamaño de cerebro es superado por una nuez—, a una modelo de catálogo pija sacada del manual de estereotipos más estereotipados y, para finalizar, una estereotipada diva neurótica con cierta mentalidad oscura también estereotipada. Sí, todos son estereotipos… entre arcadas y vergüenza ajena y, por supuesto, más estereotipos. 

En teoría la premisa debería tratar sobre tres modelos, dos chicas y un chico, que reciben a un cuarto complemente feo y gordo. La mecánica se completa con la interacción de todos ellos con su agente interpretado por Joseph May, al que conocemos de “Episodes”. Supuestamente todo debería ser divertido, jugando con dos mundos completamente opuestos para que veamos a esos modelos en los antiguos ambientes —y tugurios— del protagonista mientras que éste debe también encajar en ese sofisticado y perfecto mundo de gente bonita y escultural atrapada en fiestas y fama. El problema es que Brianne Howey, Rebecca Reid y Eric Aragon no llegan ni al atractivo de Rossy de Palma ni de Ben Stiller e incluso Owen Wilson… dejando cierta sensación de que David Hoffman es aquel que se ajusta únicamente como modelo. Todo es extraño, horrible, tróspido… como si nada encajara en ese mundo de actores ingleses fingiendo ser habitantes de un Miami de cartón piedra leyendo los peores guiones escritos para una comedia en mucho tiempo. Con sólo decir que Comedy Central en España retiró rápidamente la serie en las plataformas online donde se podía padecer… Se entiende que tuvieron que recibir toneladas de amenazas de muerte y demandas por los daños cerebrales provocados a sus víctimas. 

El problema de “I Live with Models” es su concepción preocupantemente infra-amateur teniendo en cuenta que cualquier webserie contiene chistes más inspirados de los que se divisan en libretos que únicamente pueden servir como dramas de terror surrealista. Las tramas y argumentos no pasan de una simple ocurrencia y su desarrollo encaja en una sesión de cartas de tarot, lanzadas completamente de modo aleatorio para llegar a un final que es simplemente el principio. Desconozco si la sitcom pretende ser conceptual o una burla pueril sobre el mundo de la moda y la fama. La cuestión es que el tono infantil contrasta con bromas de humor sexual y soez, con elementos tan trillados y desgastados que finalmente convierten el conjunto en algo invisible e incluso insoportable. Antes de que aterrice “Zoolander 2”, “I Live with Models” desde luego ha cumplido con un oscuro propósito: convertir a la inefable “Gym Tony” en “Seinfeld”. En vista de que esta defecación catódica como comedia vale lo mismo que Kiko Rivera de modelo Calvin Klein, entiendo que “I Live with Models” tiene otras utilidades para la sociedad como las siguientes: 

• Provocar la muerte cerebral de toda persona que consiga acabar sus ocho episodios.

• Servir como elemento científico 100% fiable para provocar la eutanasia. 

• Arma de destrucción masiva para aniquilar a los ciudadanos de los países que la emitan en primetime.

No vivan con estos seres que dicen ser modelos bajo ningún concepto. Avisados quedan. 

Historias Bastardas Extraordinarias by Maldito Bastardo is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.